Los coreógrafos aragoneses Diego Cruz y Jorge García Pérez han creado durante el confinamiento sendas plataformas digitales utilizadas por cientos de profesionales de todo el mundo para su formación
Son coreógrafos y aman la danza por encima de todo. Diego Cruz es solista en el ballet de San Francisco (USA) y Jorge García Pérez en el de Basilea (Suiza). Tras la pandemia global de la COVID-19, miles de profesionales de todo el mundo hubieron de recluirse en sus casas, ensayar por su cuenta y mantenerse en forma cada cual a su manera. Se acabaron las funciones, los ensayos, las puestas a punto colectivas. Para paliar esa falta, estos dos creadores aragoneses han puesto en marcha dos plataformas digitales formativas que han causado furor entre los bailarines recluidos a nivel global.
Se trata de la plataforma DanceLive Europe, de Jorge García Pérez, y la Worldwide Ballet Class, de Diego Cruz. Ambas ofrecen soporte formativo on line profesional para bailarines y aunque han nacido al calor del confinamiento, tienen vocación de continuar más allá. También sus contenidos trascienden lo estrictamente coreográfico. Según explica nuestro socio Jorge García Pérez, debido a la gran acogida que tuvieron, “muy pronto empezamos a ofrecer también clases de otras disciplinas que nos vienen muy bien a los bailarines, como yoga o gyrokinesis, o incluso cocina especializada. Hablamos con bailarines muy conocidos a nivel internacional y la verdad es que todos estuvieron muy dispuestos a colaborar. Hasta a nosotros nos sorprendió la rapidez con la que la plataforma se convirtió en viral dentro de nuestro mundillo".
Por amor al arte
Centenares de bailarines profesionales de todos los continentes del mundo han ido enganchándose a la iniciativa, que en cualquiera de sus dos formatos ofrecen, desde el pasado 13 de abril, al menos tres clases diarias, en inglés y con una duración de entre 75 y 90 minutos. “Todo por amor al arte”, confiesa García Pérez.
La respuesta ha sido tan positiva que sus responsables apuestan por darle continuidad. Si bien, ahora que el confinamiento parece haberse superado, barajan una reformulación de contenidos sobre la que ya están pensando.
Las plataformas han servido para tratar de romper la barrera del confinamiento y ahora deben adaptarse a las nuevas realidades que se dan y se darán en todo el mundo. Por ellas has pasado en calidad de docentes no previstos bailarinas y bailarines como Julie Kent, Meelis Pakri, Felipe Díaz, Ángel Corella o Andrey Klemm.